25 años

25 años. Un cuarto de siglo. Dos décadas y un lustro.

Creo que a veces no nos paramos a reflexionar sobre la vida hasta que no llegan fechas señaladas: cumpleaños, años nuevos, nacimientos, personas que se van… No deberíamos esperar a que llegue una fecha importante para pensar en dónde estamos y en a dónde nos gustaría ir. Sin embargo, hoy he pensado en el viaje recorrido y me he dado cuenta de que, al mirar a mi alrededor, hay gente que siempre ha estado ahí para hacerme la vida mucho más bella, luminosa y soportable. Personas amarillas, que diría Albert Espinosa.

Hoy he escuchado en un podcast una frase de Mike Tyson: todos tenemos un plan hasta que llega el primer golpe. La he escuchado y he pensado en todas esas personas porque, gracias a ellas, los golpes se llevan mucho mejor. Personas que me ayudan a levantarme y no tirar la toalla, por las que me partiría la cara.

Así que voy a seguir moviéndome, dejando que me pasen cosas, haciendo planes con la gente a la que quiero. Y, si hay que vivir, prefiero hacerlo aprendiendo de mis errores que no haberlos cometido nunca. Porque, como escribió Raquel Beck: «Me da miedo que, dentro de unos años, mi yo adulta me señale y me diga: “mira lo que no has hecho”».

Qué bonito dar una nueva vuelta al sol. Qué suerte la mía…


Escrito por

Julia. Canarias, 25 febreros. Graduada en Estudios Francófonos Aplicados. Soy una mortal más que intenta descifrarse a través de las palabras y que escribe para saber lo que siente.

Déjame leer tu valiosa opinión

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s