¡Hola!
He estado ausente por aquí durante un tiempo, pero hoy me apetecía hablarles (o escribirles) sobre una autora que he leído recientemente: Patricia Benito. Muchos de ustedes seguramente ya la conocen, pero yo aún no había leído nada suyo.
Patricia Benito es una escritora nacida en Las Palmas de Gran Canaria en 1978 que ha publicado tres poemarios hasta la fecha: Primero de poeta (2015), Tu lado del sofá (2018) y Cada noche te escribo (2021). Benito, que trabajó como crupier en un casino de Barcelona y en la unidad de dolor de varios hospitales, no comenzó a escribir hasta su edad adulta. A pesar de convertirse en un fenómeno literario en redes, dice no haberse acercado al mundo de la poesía hasta que asistió a un recital del poeta Escandar: «Tuve un cambio de vida, de trabajo y empecé de cero. Yo no conocía nada de este mundo, no había escrito en mi vida, ni siquiera el típico diario de adolescente, pero un día fui a un recital del poeta Escandar Algeet y me quedé loca» (Diario de Navarra).
«Nací en una isla y no sé nadar. He vivido en tres ciudades, nueve hogares y alguna casa. Me he enamorado una vez. He bajado corriendo de un tren en llamas y he visto explotar una bomba. No creo en las cosas que duran para siempre. O sí, no lo sé. Las fresas, con leche condensada. Cada cierto tiempo necesito cambiar cosas de sitio, ya sean muebles, personas o toda mi vida. Si no viajo, no puedo respirar. Tengo incontinencia sentiverbal. Me pierdo en cualquier atardecer, a ser posible con mar. Prequiero demasiado rápido y desquiero demasiado lento. No recuerdo la última vez que me dormí pronto. Mido el tiempo en medias cervezas y no hago planes a más de cerveza y media. Lloro en las manifestaciones cuando oigo a Labordeta. Te necesito cerca, pero no encima. Siempre voy con el más débil. No imagino un mundo sin queso, ni sin chocolate. Casi siempre es mejor dar que recibir, y no estoy hablando de sexo; no solo de sexo. La reina de mi casa es una gata coja que no para de ronronear. La empatía debería mover el mundo, no solo el mío. Si has leído hasta aquí, te puedes quedar».
– PATRICIA BENITO

Tras la lectura de sus tres libros, debo decir que me han gustado bastante sus versos. Su poesía es transparente, sin artificios. Es sencilla, que no simple. Sus poemas son de esos con los que te identificas, de esos que parece que te hablan directamente. De esos llenos de vida, que te hacen entender tus heridas y ver que hay belleza y poesía en todas las cosas.
Sin más dilación, dejo por aquí algunos de los fragmentos que más me gustaron de estos tres poemarios.
Tras la lectura de sus tres libros, debo decir que me han gustado bastante sus versos. Su poesía es transparente, sin artificios. Es sencilla, que no simple. Sus poemas son de esos con los que te identificas, de esos que parece que te hablan directamente. De esos llenos de vida, que te hacen entender tus heridas y ver que hay belleza y poesía en todas las cosas. Sin más dilación, dejo por aquí algunos de los fragmentos que más me gustaron de estos tres poemarios.
«Vive, joder, vive. Y si algo no te gusta, cámbialo. Y si algo te da miedo, supéralo. Y si algo te enamora, agárralo».
«‘‘Quiero/amo/me flipa/voy/puedo” es la mejor manera de construir tus frases, tus días y toda tu vida».
«Nos contamos cosas a través de pantallas heladas y temblamos más con una batería baja que con un susurro en la nuca».
«Hay gente que entra en tu vida como un elefante en una cacharrería. No por el ruido que hace cuando llega, sino por lo desordenado que lo deja todo cuando se va».
«Asombrosamente todavía hay gente que vive de puertas par afuera: un jardín precioso, una fachada preciosa, un interior en ruinas».
«Nos fuimos borrando sin darnos casi cuenta y el paisaje del recuerdo es lo único que queda».
«No vas a volver, es algo que ni dudo. Hablo de volver como si alguna vez hubieras estado aquí».
«De los sitios a los que nunca volvería, tú eres mi favorito».
«Ojalá hubieras sabido recordarme por qué me gustaba estar ahí».
«Todos los sitios en los que me escondía están llenos de gente».
«Dejarse salvar es un lujo que no todo el mundo es capaz de usar».
«Me escribo para entenderlo, pero el nudo sigue ahí».
«Te escribo como si alguna vez te hubiera tenido delante, te espero como esperan las rocas la furia del mar».
«Te añoro como se añora todo lo que nos da vida todo lo que no se olvida por las noches nos devora».
Voilà! Eso es todo, amigos y amigas. Espero que les haya gustado la recopilación. Lean y besen mucho, que la lengua está para usarla.
Feliz verano, un abrazo. ♥