Amor analógico

Estoy cansada

de nuestra manera

de amar.

 

De decir

te echo de menos

solamente cuando

nos sentimos solos

de más.

 

De vivir de match en match,

de colchón en colchón,

sin conectar nunca de verdad

con nadie.

 

De dar corazones verdes

para olvidar

nuestras vidas grises.

 

De elegir con quién

pasaremos la noche

como quien busca

en un catálogo de Ikea.

 

De que sea más sencillo

tener un orgasmo

que una conversación sincera.

 

De pasar de una foto a otra

con ojos hambrientos,

como quien entra a una carnicería

en busca del pedazo de carne

más sabroso.

 

De hincar los dientes,

pasar la lengua,

besar cuellos,

gastarse la boca en otros labios

y chocar contra otros cuerpos,

pero no llegar jamás

a lo que hay bajo la piel.

 

De saciar el deseo en una noche

y marcharse de madrugada.

 

De temer tanto al compromiso

que pensamos que ir más allá

de los tres polvos

nos compromete.

 

De promesas vacías,

cerebros vacíos.

 

De aprenderse de memoria

el juego de la seducción

y del placer,

pero no recordar

cómo nos queríamos antes.

 

De esta sociedad de lo instantáneo

en la que podemos pedir

comida y pieles

a domicilio

a golpe de clic.

 

En este siglo tan virtual,

a veces echo de menos

algo real.

 

En este mundo tan digital,

a veces desearía

un amor analógico.

 


Escrito por

Julia. Canarias, 25 febreros. Graduada en Estudios Francófonos Aplicados. Soy una mortal más que intenta descifrarse a través de las palabras y que escribe para saber lo que siente.

8 comentarios sobre “Amor analógico

Déjame leer tu valiosa opinión

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s