Foto de la entrada: Ryan Franco (Unsplash)
Debo admitir que la primera vez que te besé,
lo hice con la boca llena de dudas
y la única intención de borrar de mis labios
el regusto de otros
que habían dejado demasiada huella.
Empecé a conocerte
como quien va a una fiesta sin ganas
y acaba danzando hasta el amanecer,
como una ilusa que promete beber
solo una copa
y termina enamorándose de la borrachera.
Esta mañana,
después de que te fueras,
escuché la voz de Sabina
cuando pensé:
cuidado, chavala,
te estás enamorando.
Y no sé si esta presión en el pecho
es amor, aunque
me estás poniendo muy difícil
no quererte,
estás arruinando mi soledad.
Has llegado a mi presente con la ilusión
de un niño que está descubriendo la vida
y aún no ha conocido el dolor.
Me observaste bailar
y sospechaste en el ruido de cristales
de mis entrañas
el potencial de un espejo
que reflejara el cariño con el que me miras,
leíste la nostalgia del mar en mi mirada
y comenzaste a crear playas
en cada esquina de esta ciudad.
No puedo negarlo,
chico,
estás ganando méritos.
Porque reduces a ruinas
todos los muros de tu alma,
me abres todas las puertas y me dejas acceder
a las partes que más te duelen
sin miedo a que camine sobre tu daño.
Y cuando adviertes que mi corazón
está en estado de emergencia
llegas con una botella de vino y unos oídos
dispuestos a resistir
hasta que nazca un nuevo día
y mueran mis penas.
Y tocas a la puerta con una rosa preservada
para decirme que esa flor es la metáfora
de que nosotros también seremos sempiternos.
Y apareces sin previo aviso
ni permiso
con dos entradas de cine
diciéndome que no aceptarás un no
por respuesta.
Y me sacas de la biblioteca
para ir a comer juntos
cuando ves que estoy naufragando
en el aburrimiento de mis apuntes.
Y declaras que me echas de menos
cuando apenas te ha dado tiempo a irte.
Y me dices que me quieres
en todos los idiomas que conoces.
Y me comparas con la luna.
A mí, que soy una selenófila.
Y vamos inventando
poco a poco un idioma nuevo
mezclando palabras de tu país y del mío.
Y me hablas de ir a París,
de empezar una revolución
contra el carácter de los franceses.
Y me dices orgulloso
que te he desvirgado etílicamente
porque jamás habías estado borracho
antes de conocerme.
Y me enseñas toda la felicidad
que cabe en catorce metros cuadrados
cuando bailamos de madrugada en mi residencia.
Y tenemos una conversación
solo con GIFs
hasta que uno de los dos
tiene que sacar la bandera blanca
y firmar la rendición.
Y me enseñas cómo se respira la vida
desde lo alto de una montaña nevada,
cuánta música cabe en el silencio
de un guiño entre nuestro grupo de amigos
o la manera de arder cuando llega el invierno.
Y me miras con los ojos brillantes
de admiración.
Y te ríes
como si la vida fuese
absurdamente sencilla y bella.
Y me abrazas tan fuerte
que puedo sentir la tristeza
crujir bajo la piel.
Y rompes mis certezas.
Y haces que me desnude emocionalmente
como nunca lo había hecho
en el idioma más bonito del mundo.
Y dices que conocerme
ha sido tu mejor serendipia
y tu verdad más hermosa.
Y gritas que me amas hasta quedarte sin voz,
aunque a veces no lo hagas con palabras.
Haciendo que me pregunte
si no estaré yo,
también,
empezando
a hacerlo.
Miss Poessía
Esta obra está bajo una Licencia Crea
No se puede escribir más bonito. Me encanta🍀💜
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A mí sí que me ha encantado tu comentario, muchas gracias por estas bonitas palabras. Es todo un placer que te guste… ¡Un fuerte abrazo y que pases un feliz jueves! ❤
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Pues me alegro de alegrarte. Es muy agradable reencontrar tus textos. Escribes muy bien, aquí me tienes leyéndote y me encantas☺️🍀. Feliz día a ti también.
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precioso miss
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¡Muchísimas gracias! ❤ Preciosos son los comentarios que siempre me dejas, gracias por motivarme a seguir, en serio…
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DE NADA
COMENTARIOS A BELLAS PALABRAS!!
BESO
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Bueeeeeno, empezamos muy bien la visita. Me encanta lo que leo! Me voy a dar un atracón. YA sabía yo que la casualidad también me iba a traer un regalo.
Este poema es Esplendor en la hierba y plenitud en la flor…. es juventud, vida, amor.
Hereuse d’être ici!
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Muchísimas gracias por esta preciosidad de comentario, Marta. Un placer que te haya gustado, me alegro de tenerte por aquí. Heureuse de te voir par ici, tu es chez toi! 😉
Un abrazo ♡
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Hermosísimo. Realmente Bellísimo. Bello-Hermoso ❤❤
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¡Muchísimas gracias, Anibal! ❤ De verdad que te agradezco mucho el apoyo que siempre me das con tus comentarios.
Un abrazo
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